Ficha técnica:
Título: Cara a cara con el psicópata.
Autor: Vicente Garrido.
Año: 2011.
Género: No ficción.
Cantidad de páginas: 240.
Editorial: Ariel.
Sinopsis:
Opinión personal:
La sociedad del siglo XXI observa, incrédula, que existe un tipo de ser
humano al que todavía no había aprendido a conocer bien. De hecho, está
casi indefensa ante él, y cuando se da cuenta de sus fechorías no tiene
más remedio que calificarlo como “loco” o “terrorista”. Y así, ya sea en
la familia, en el trabajo o en el mundo público de la comunicación o la
política, el psicópata no sólo ataca sin ser detectado, sino que
ayuda a configurar el caos en una sociedad en la que cada vez se
encuentra más a gusto. Vicente Garrido Genovés, el mayor experto en
psicopatía de España, escribe un libro absorbente, en el que explica de
modo revelador cómo piensa y siente el camaleón, y por vez primera se
dedica de modo exhaustivo a enseñar cómo detectarlo y reconocerlo, y
cómo tenemos que enfrentarlo para salir victoriosos de esta lucha
desigual. Garrido nos lleva cara a cara con el psicópata y escribe un
libro necesario en la preservación de la salud mental ante una de las
más grandes amenazas.
Opinión personal:
En este ensayo Vicente Garrido, experto en criminología en España, nos
abre las puertas de la mente del psicópata. No necesariamente el psicópata es
el asesino múltiple que vemos en una serie, no es el ladrón que mató sin piedad
a un comerciante. La mayoría de las veces es nuestro compañero de trabajo, el
gerente de la empresa, la pareja de una amiga, el político que vemos hablar en
los medios, el periodista respetado.
¿Cuánta responsabilidad tenemos como individuos en detectar a esa clase
de personas? ¿Realmente tenemos herramientas para detectarlos y detenerlos
antes que causen un desastre en nuestro entorno?
Vicente Garrido desenmascara al verdadero psicópata: al que no podemos
catalogar, al que nuestras amistades y conocidos desconfiarían si lo tildamos
de psicópata. Aquella persona que conocemos hace tantos años, pero que de
puertas adentro maltrata, golpea, viola, y se aprovecha de los miedos de
quienes tiene al lado.
En primera instancia, se explica las características esenciales de un
psicópata integrado a la sociedad. En el ámbito laboral es muy posible que nos
encontremos con un psicópata. Las causas son sencillas, y se deben a que generalmente
está integrado. Es una persona capaz de relacionarse muy bien con los demás, de
aparentar sentimientos, de confundirse como un camaleón. Sin embargo, también
son personas muy seguras y eficientes en su trabajo. Incluso son capaces de
llegar a ser grandes profesionales.
El problema, entonces, radica en la detección temprana, en prevenir la
catástrofe antes de que se produzca... Antes de que el acoso a una compañera de
trabajo termine en una relación tóxica y arruine su vida; antes de que ese
hombre (y hablo de hombres porque los psicópatas son en la gran mayoría de ese
género) lleve a la quiebra intencionadamente a la empresa.
Cara a cara con el psicópata es un libro que nos da armas contra esta
clase de personas. Armas para detectarlos pero ,si ya es demasiado tarde, armas
para enfrentarnos a ellos y no hundirnos en la miseria a la que podríamos
llegar si una persona así nos utiliza para sus propósitos.
En el segundo capítulo, encontraremos una detallada explicación de cómo
es su mundo. El psicópata no procesa los sentimientos, una parte de su amígdala
está dañada a esos estímulos, por lo que la piedad no está entre sus
prioridades. Su vida es un juego de ajedrez en dónde utilizará a personas para
obtener un status social, conseguir sexo o dinero.
El tercer capítulo pone el centro en las víctimas y por qué somos
vulnerables para estas criaturas. En general, no queremos creer que existan
personas como los psicópatas, pero debemos ser conscientes de que existen, y
saber detectarlos para no relacionarnos con esas personas si no es totalmente
necesario. La mayoría de las veces los niños y las mujeres son las primeras
víctimas.
Ésta es la postura políticamente
correcta: todos los hombres pueden matar, todos estamos imbuidos de la cultura
machista… Los psicópatas deben leer esta y otras frases parecidas y morirse de
la risa. Mientras se les ignore dentro de la masa informe de los machistas,
ellos se sentirán a salvo. Hay que luchar contra la discriminación y la
desigualdad entre sexos porque es una cuestión necesaria en toda sociedad
democrática, pero ello no bastará para combatir eficazmente la violencia contra
las mujeres. Las chicas y las mujeres han de aprender a identificar y no
tolerar los avances de los agresores más peligrosos, entre los que se hallan
los psicópatas. Estos actuarán con violencia sin que les importe lo machista
que sea la sociedad, si bien como es lógico, una sociedad que denigra a las
mujeres facilita el que no sean perseguidos ni castigados por sus fechorías.
En el cuarto capítulo, hace hincapié, una vez más, en la detección precoz del
psicópata, aunque detalla en mucho más profundidad, dando pasos claros para su
detección. Se recalca, una vez más, que la mayoría de los psicópatas están
integrados en la sociedad y que gozan de una muy buena imagen. Nos pone como
ejemplo a Van Gogh.
En el quinto, la temida lucha. Garrido nos ilustra con testimonios
reales, que son verdaderamente escalofriantes.
¿Qué es, en resumen, lo que se
opone entre un psicópata y su víctima? Se trata de dos voluntades
contrapuestas. La del psicópata, por capturar la propia voluntad de su presa
primero, luego por explotarla y atacarla, y finalmente por disfrutar el gozo
del «deleite del desprecio»: su yo consiste en demostrar que es superior a su
víctima, su gran emoción es la sensación de que te adueñas del otro. Ésta es la
esencia del ser del psicópata. La otra voluntad es la de la víctima, que se
opone a perder su esencia, esto es la libertad de vivir de acuerdo con unos
valores que incluyen la honestidad, el respeto a los otros y la libertad.
Por último, una madre nos narra de puño y letra su experiencia al
adoptar un niño psicópata ruso. De acuerdo con los estudios realizados hasta el
momento, la raíz de la psicopatía es algo genético. Sin embargo, se puede
desarrollar de distintas maneras dependiendo del entorno. Garrido subraya la
importancia (desde el Estado) de procurar una infancia plena de todos los niños.
Por ejemplo, un niño psicópata que ha recibido el cariño, cuidado y educación
de sus padres, rara vez llegará a ser un psicópata violento.
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